Esta nave industrial estaba originalmente dividida en dos partes y era usado como almacén. Disponía de paneles solares y un depósito de agua caliente de 500 litros. Todos componentes del local parecían predestinados para llevar adelante este proyecto tan interesante.
Protegimos todo el suelo frente al impacto generado por los ejercicios de Crossfit. Después, revestimos las pareces con paneles de OSB y derribamos todos los falsos techos para dejar a la vista la impresionante cercha de acero. A los vestuarios le dimos acabado de microcemento combinado con complementos de acero negro. Finalmente, actualizamos la instalación de ACS. En cuanto terminamos con las instalaciones de acondicionamiento de aire y protección frente a incendios, el centro Crossfit Arrasate inició su actividad.