Comenzamos con un análisis integral de la estructura del edificio, analizando pieza a pieza el estado de cada una de ellas. Conservamos las piezas en buen estado y sustituimos los elementos deteriorados, con la intención de reducir al máximo el impacto de la intervención.

Al mismo tiempo, pusimos en marcha un tratamiento con inyecciones y anzuelos contra las termitas para erradicar el ataque de las mismas de la mano de una empresa experta. Al tratarse de un emplazamiento al borde del rio, la humedad era alta en las plantas bajas, sobre todo en el semisótano. Como medida contra el ataque de las termitas, alejamos la estructura de madera de la fuente de humedad, utilizando piezas de acero en las columnas sustituidas en la planta sótano.

Una vez garantizada la estabilidad del edificio, rehabilitamos la fachada.